Desde el principio Dios ha querido, deseado y anhelado que el hombre tomara la iniciativa de acercarse a Él. Debido a la caída del hombre. Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro. Lo que ha causado esto es una separación entre Dios y el hombre. Hebreos 4:16
I. JAIRO UN HOMBRE DESESPERADO (v 41, 42)
La Diferencia Entre Los Que Oprimen A Jesús A Los Que Logran Alcanzar A Tocarlo (V, 42)
- Espectadores
- Participantes
II. LA MUJER DE FLUJO DE SANGRE (V. 43)
La Insistencia De La Mujer Tuvo Su Fruto
III. CINCO (5) PASOS A CONSIDERAR EN ESTE PASAJE.
Tenemos Que:
- Reconocer Que Tenemos Una Necesidad (V.43)
- Ser Persistentes En Recibir Nuestro Milagro (V.44)
- Acercarse Al Maestro (V.44)
- Tocar El Manto De Jesús (V.47)
- Tener Fe En Medio De La Circunstancia Difícil (v, 48) Mateo 9:21
IV. RESURRECCIÓN Y VIDA. (LUCAS 8:49-56)
a. Para Dios no hay nada imposible.
b. Dios venció la muerte
Tenemos que ser participantes de la bendición de Dios y no simples espectadores. Dios quiere que nos acerquemos a El confiadamente. Moisés fue un hombre que rompió las barreras del conformismo y vio la Gloria de Dios (Éxodo 19:16-25).