¿Qué es la Identidad?
El diccionario define el término “identidad” como “el carácter particular o la personalidad de un individuo”. También dice que es el “conjunto de rasgos propios de un individuo o de una colectividad que lo caracterizan frente a los demás”. Otra definición establece que es la “conciencia que una persona tiene de ser ella misma y distinta a los demás”.
En los últimos tiempos, esta palabra ha tomado gran relevancia debido a que el ser humano ha estado confrontando lo que los psicológos llaman “crisis de identidad”. Los conflictos sufridos por la humanidad y las presiones sociales causadas por esto, le han creado confusión psicológica y trastornos de la conducta.
La Identidad con que fuimos Creados.
- El hombre perdió primero su identidad espiritual, y esto es lo que lo ha llevado a sufrir la decadencia en todos los otros aspectos de su existencia.
- El hombre fue creado en un principio para ser un ente social, psicológico y espiritual.
Génesis 1:26-27: “Entonces dijo Dios: Hagamos el hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos, llenad la Tierra y sojuzgadla…”.
- La identidad de Adán provenía de Dios, por lo tanto nuestra identidad también proviene de Él.
- El problema fue que al ser engañado y desobedecer a Dios, Adán perdió esta identidad, y por causa de ello, toda la raza humana fue forzada a vivir en un estado de confusión y pérdida constante de todo bien.
- En el Jardín del Edén, Satanás realizó el primer robo de identidad de la historia: robó nuestra identidad.
- Así, al suceder esto, vemos a Adán y a Eva desnudos, desprovistos de todo lo que los podía identificar con su progenitor, y se cubren porque al verse, ellos mismos empiezan a sentir que algo les falta.
- Cuando el hombre peca y se aparta de Dios pierde su identidad, y junto con ella pierde también su propósito y su razón de ser, tuerce su destino.
- La comunión, es decir, la “común unión” que había entre Adán y Dios, se rompió. El pecado había marcado una diferencia, había establecido una separación.Adán ya no se parecía a su Padre. Había perdido su identidad.
Entendiendo cómo fuimos creados.
Esta era la identidad del hombre que Dios creó en el principio: Un ser a la imagen y semejanza de Dios mismo; Rey y Señor de toda la Tierra, así como Dios lo era en el cielo; y que debía llenarla de seres con igual identidad, que pudieran reflejar la gloria de su Padre y Creador. Esta era la identidad con que fuimos creados, y el destino glorioso que estábamos llamados a cumplir.
– Estos son los principios bíblicos que establecen nuestra identidad al ser creados:
- “Hagamos al hombre a nuestra imagen”
- “Conforme a nuestra semejanza”
- “Y señoreen en…toda la Tierra”
- “Llenad la Tierra y sojuzgadla”
Vamos a ver 4 Principios Bíblicos que establecen nuestra identidad:
1er. Principio – Según el modelo del creador: “A la imagen de Dios”. (V. 26, 27)
La imagen de Dios tiene que ver con capacidades como la razón, el pensamiento, la personalidad y el intelecto; la capacidad de relacionarse, de ver, escuchar, hablar y comunicarse.
- Capacidad de Pensar o razonar.
- Capacidad de sentir, emociones.
- Capacidad de voluntad, tomar decisiones.
La capacidad creativa, de hacer proyectos, de utilizar la palabra viva y eficaz para hacer todo lo que era bueno.
2do. Principio – Con un Corazón conforme al de Él: “A la semejanza de Dios”. (v. 26)
La semejanza tiene que ver con las cualidades morales como el amor, la misericordia, la justicia, la santidad, la verdad y las demás cosas relacionadas con el espíritu.
Entre sus facultades se le dieron al hombre estaba la libertad de actuar, de decidir por sí mismo, esto es, el libre albedrío de escoger según su voluntad. Esto también era un atributo del Padre.
3er. Principio – Fuimos creados con un propósito: “Señoreen en toda la Tierra”. (v. 26)
Dios creó al hombre para que fuera un agente de Su Reino, para gobernar y someter al resto de la creación. Dios nos hizo socios participantes en Su gobierno.
Señorear significa ejercer absoluta autoridad y control sobre algo. El hombre tenía poder para mandar sobre la naturaleza. Era señor de la creación. Éramos valiosos para Dios.
4to. Principio – Fuimos creados con un destino: “Llenen la Tierra y sojúzgenla”. (v. 28)
Dios creó al hombre para que llenara la Tierra con otros seres semejantes a el, que debían reproducirse con la misma identidad que Dios le dió a nuestros primeros padres.
Serían a imagen y semejanza de Dios, señorearían sobre toda la Tierra e impondrían su autoridad sobre la naturaleza.
El hombre se pregunta: ¿Quién soy? ¿Por qué soy como soy? ¿A quién me parezco? ¿De dónde vengo? ¿Hacia dónde voy? Y mediante estas interrogantes, trata de encontrar su identidad perdida. Pero esto sólo podrá tener respuesta en el mismo que nos dió Su identidad en el principio: EL CREADOR… EL PADRE… DIOS.