Pero muchas veces nos preguntamos cual es la voluntad del Señor, pero a su vez conocemos la respuesta, que quiere Dios de Nosotros, Voy a compartirles 7 Cosas que Dios quiere para este año:
1. Primero que seamos Fieles
Nuestra recompensa depende de cuan fiel seamos a Dios, si le somos fiel el nos guarda y nos da vida eterna. Si les somos infieles nuestra recompensa es el infierno.
Se fiel hasta la muerte y yo te daré la corona de la vida. Apocalipsis 2.10
Amad a Jehová, todos vosotros sus santos; A los fieles guarda Jehová, y paga abundantemente al que procede con soberbia. Salmo 31.23
2. Que nos Congreguemos
Muchas veces creemos que no necesitamos congregarnos, dar diezmo, ofrenda o hasta visitar los enfermos. Pero como creceremos espiritualmente, como conoceremos a Dios, y como seremos corregidos y no asistimos a la Casa de Dios.
No dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca. Hebreos 10.25
Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí. De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a unos de estos mis hermanos más pequeño, a mi hicisteis. Mateo 25. 35,36 y 40
3. Que Confesemos nuestras faltas diariamente
La Biblia misma nos lo dice en 1 Juan 1:8-9:
1:8 Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros.
1:9 Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.
La forma de vivir limpiados del pecado es mediante la confesión.
El salmista escribió: Mientras callé mi pecado, mi cuerpo se consumió con mi gemir durante todo el día. (Salmo 32:3) Nos hace bien confesar nuestro pecado. Nos ayuda a mantener las cuentas cortas con Dios.
Ahora bien, no me refiero solamente a hacer lo que hacen muchos, que es decir: Dios, perdóname si te he fallado. Esto no envuelve ningún reconocimiento directo de que hemos pecado, ni identifica el pecado que hemos cometido.
La palabra griega que se traduce confesar significa, literalmente, decir lo mismo. Es decir, cuando confesamos nuestro pecado a Dios, lo vemos de la misma manera en que Él lo ve. Es necesario, entonces, identificar el pecado ante Dios para confesárselo. Tenemos que nombrarlo ante El.
4. Que seamos bendecidos, tanto espiritual como material. 3 Jn 2
Dios no quiere que vivamos en miseria tanto espiritual como material. Él quiere que aprendamos a depender de ÉL.
Hay bendiciones sobre la cabeza del justo. Proverbio 10.6
La bendición de Jehová es la que enriquece, y no añade tristeza con ella. Proverbio 10.22
5. Que tengamos salud
Dios no quiere que estemos enfermos, pero muchas veces ocurre por nuestra desobediencia o por medios naturales de la vida. En fin el tiene una palabra para ti acerca de este tema.
Si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, e hicieres lo recto delante de sus ojos, y dieres oídos a sus mandamiento, y guardares todos sus estatutos, ninguna enfermedad de las que envié a los egipcios te enviare a ti; porque yo soy Jehová tu sanador. Éxodo 15.26
El es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias. Salmo 103.3
6. Que Pongamos a Dios en primer lugar en las finanzas
Se ha dicho que se puede conocer más acerca de una persona observando su chequera. La forma como lo usa refleja la madurez de su vida cristiana. Lo que hacemos con nuestro dinero demuestra dónde está nuestro corazón. Si queremos poner a Dios en primer lugar en nuestras vidas, Él tiene que reinar sobre nuestro uso del dinero.
Hallamos este principio en Proverbios 3:9-10:
3:9 Honra a Jehová con tus bienes, Y con las primicias de todos tus frutos;
3:10 Y serán llenos tus graneros con abundancia, Y tus lagares rebosarán de mosto.
Bajo la ley del Antiguo Testamento, las primicias de la cosecha pertenecían al Señor y se ofrecían como sacrificio a Él. Esto servía para sostener a los sacerdotes, pero también era un recordatorio regular de que la cosecha venía del Señor.
Cuando nosotros le damos a Dios lo que nos sobra al final de la semana, mostramos que Él ocupa un lugar poco importante en nuestro corazón. La Biblia nos enseña otro patrón: Cada uno dé como propuso en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al dador alegre (2 Corintios 9:7).
Además de honrar a Dios con las primicias de nuestros ingresos, también lo honramos cuando somos honrados en nuestro trato con los demás. El está presente en cada trato que hacemos, y si nos aprovechamos de otros, no le agrada.
El mundo nos dice que la felicidad está en tener más, pero es una mentira. La ambición desmedida es el camino a la destrucción.
¿Sabes cuál es la diferencia entre una ventana y un espejo? Sólo una leve capa de plata. Si dejas que la plata llene tu vista, no podrás ver el glorioso mundo que Dios ha creado; no podrás ver a los demás; sólo te verás a ti mismo. Para ser libre, pon a Dios en primer lugar en tus finanzas. El ha prometido suplir tus necesidades. Confía en El.
7. Que Alcance a alguien para Cristo
Él no quiere que nadie se pierda, el infierno fue creado para Satanás y los demonios. Por tanto el quiere que todo hombre sea salvo, pero esta salvación depende también de cada ser humano; la tomamos o la rechazamos.
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Juan 3.16
El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento. 2 Pedro 3. 9
Conclusión
Así que en este nuevo año, año de comienzo y año de bendiciones mantengámonos firmes para que la voluntad del Señor sea realizada en nuestras vidas. Que podamos congregarnos más, Que seamos fieles a Dios, Que seamos bendecidos, Que tengamos salud y sobre todo que podamos estar listos cuando la trompeta suene. Que nuestras vestiduras sean blancas, sin manchas y sin arrugas. Que en este nuevo año la paz del Señor esté en nuestras vidas.