El Salmo 46:10 dice: “Estad quietos, y conoced que yo soy Dios…”. La palabra hebrea para “estar quieto” es rafah, y se puede traducir por soltar, dejar ir, o estar tranquilo. Es como si Dios estuviese diciendo: “Déjalo en mis manos, y conoce que yo soy Dios…”
La Biblia dice también: “Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro” (Hebreos 4:16). Sigue leyendo «Déjalo en las manos del Señor»