¿Sabías que en el pasado Salón del Automóvil se anunció el primer coche del mundo capaz de encenderse con la mente?
En realidad, el funcionamiento es simple, aunque complejo a la vez. El conductor tiene unos electrodos conectados al cerebro, que están conectados a su vez a un pequeño ordenador dentro del coche. Basta entonces que el conductor se concentre en un solo pensamiento: encender el motor del coche. Unos segundos más tarde, el coche “arranca solo”. Sigue leyendo «¡Tu fe en Jesús mueve montañas!»